¡Disculpad mi osadía!


La fortaleza de la soledad.
'Ya sabes a lo que me refiero...medianoche, un camino frío y solitario en el bosque, la inquietante oscuridad y en ella un par de grandes ojos brillantes sobre un árbol muerto que la niebla abraza, desde allí se puede escuchar un tétrico y breve sonido grave antes de que un búho tome vuelo.'

lunes, 22 de septiembre de 2014

Besos en blanco y negro.

Cuántas noches más hacen falta para que vengas, 

cuántas para dejar de dormir en bragas y no dormir encima de ti. 

Cuántas noches voy a tener que deshacer las sábanas 
para que parezca que has estado aquí. 
Cuántas para perforar esta ausencia. 

Cuántas noches voy a tener que soportar este vacío, y cuántas que te metas en mi cabeza sin permiso. 

Cuántas noches voy a soñar que te sueño, 
y que me despierto 
y me besayunas, 
o me comes el coño, que viene siendo lo mismo. 

Cuántas voy a imaginar que nos hacemos 
y deshacemos a nuestro paso. 

Cuántas noches más voy a desvelarme porque tengo pesadillas 
y no hay nadie quien me las abrace.

Yo ya voy por quinientas y media cuenta perdida de noches por olvidarte, 
y tú sigues aquí, estando sin estar,
más escalofrío entre piel que nunca. 
Más poesía entre las piernas que siempre.

2 comentarios:

  1. Me ha encantado esta entrada. Como duele ese estando sin estar.. Ay.

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  2. La indiferencia acompañada de tristeza siempre es más dolorosa, y bueno.
    Muchísimas gracias por comentar, Raquel. Un besito :3

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